domingo, 13 de septiembre de 2009

Nos vamos pa´ LAS MARÍAS


La Asociación de Vecinos San Pablo, con motivo de la festividad de Las Marías en Guía, acudirá en representación de la misma, a la tradicional Romería. Acudiremos con una carreta engalanada para rendirle pleitesía a nuestra madre, y al finalizar la Romería celebraremos la fiesta con un gran Tenderete. El precio para participar en la carreta es de 15€. Para inscribirse acudir en horario de tarde a la Asociación de Vecinos. También acudiremos a la CLVIII edición de la Bajada de La Rama. Saldremos desde nuestro barrio de Becerril a las 15:00 horas, y acudiremos hasta Guía para allí, coger las guaguas que nos llevarán hasta el Lomo de Vergara.

Los Problemas con la Basura


LOS PROBLEMAS CON LA BASURA

Hace unos días nos hemos levantado con la noticia de una huelga convocada por los trabajadores de la empresa concesionaria del servicio de recogida de residuos sólidos de la Mancomunidad de Municipios del Norte de Gran Canaria, Urbaser. Esta noticia era lo que nos faltaba oír a unos vecinos ya cansados de tanta inoperancia y dejadez por parte de la Mancomunidad del Norte.

El 30 de julio de 2008, se convocó el Concurso del Servicio de Recogida de Residuos Urbanos (hace más de un año). La fecha de entrada en servicio de la nueva empresa adjudicataria estaba fijada –según la propia convocatoria- para el pasado día 01 de enero del presente año, con una duración de diez años. Pues bien, a fecha de hoy no se sabe el motivo por el cual la nueva empresa adjudicataria no se ha hecho cargo de la recogida, y seguimos mientras tanto soportando un servicio pésimo a través de un “contrato de urgencia”, prestado por la propia empresa Urbaser. Para muestra un botón con la fotografía que ilustra este artículo.

En reiteradas ocasiones hemos criticado el pésimo servicio que se viene prestando a los ciudadanos, en el que la recogida selectiva brilla por su ausencia, a pesar del dinero público invertido en campañas publicitarias concienciando a los ciudadanos la necesidad de reciclar y de separar los residuos. Desgraciadamente comprobamos una vez más que los que no terminan de concienciarse es la clase política de esta Mancomunidad Norteña. Frecuentemente les oímos a estos mismos políticos hablar de “Desarrollo sostenible” y “Dinamización Turística del Norte”, que luego se dan la cachetada con los contenedores a rebosar de basuras y observando, como el vehículo que carga la basura orgánica se lleva también los plásticos y envases que previamente habían separado los ciudadanos concienciados de la necesidad del reciclaje.

Desconocemos los motivos que impiden a la Mancomunidad del Norte resolver un problema que llevamos años arrastrando. También hubo problemas con la anterior empresa concesionaria del servicio, lo que nos indica que algo no se está haciendo bien. Ahora se suscribe un contrato de urgencia con la empresa que de forma reiterada parece que incumple con los servicios pactados.
En estas adjudicaciones de servicios públicos esenciales para la comunidad y a la vista de los acontecimientos, hay una serie de dudas que nos planteamos: ¿Se tiene previsto en el Pliego de Condiciones las fianzas y garantías suficientes para garantizar el servicio en caso de incumplimiento? ¿Quién vela porque el servicio se preste de acuerdo al pliego de condiciones y supervisa las quejas que se presentan por su mal funcionamiento?

Pensamos que este y otros servicios públicos que suponen un coste importante para las arcas municipales deben estar Mancomunados, pero es imprescindible que vayan acompañados de una gestión impecable. No sólo basta con realizar un buen pliego de condiciones, hay que velar luego por su estricto cumplimiento. No se puede dejar la gestión pública de la recogida y tratamiento de los residuos sólidos en manos de una compañía privada, expuesta a multitud de avatares, sin unas mínimas garantías que aseguren el servicio en caso de incumplimiento.
Por otra parte pensamos que el enfoque que se está dando al servicio no es del todo acertado. La basura no es un problema que hay que quitarse de en medio como sea y al precio que sea, porque molesta, porque huele mal. Al servicio de recogida de basuras hay que darle una planificación y tratamiento integral, y al mismo tiempo un estudio pormenorizado por municipios y sectores, así como su previsión de crecimiento o aumento de demanda puntual o estacional.
En estos momentos en que toda Europa está convencida de la necesidad del reciclaje y en transformar lo que hasta ahora ha sido un residuo en un producto, tenemos que cambiar el “chip” y transformar los actuales sistemas de recogida en forma de contenedores aislados, en “puntos de reciclaje” para facilitar al ciudadano la adecuada separación de sus residuos. De exigir a los comerciantes una adecuada gestión de sus residuos de forma independiente a los que utilizan los vecinos para la basura doméstica. Aquí sería interesante poner en marcha un servicio de vigilancia mancomunado que velase por el cumplimiento de la normativa existente (como ya existe en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria), e implementar los vacíos que en esta materia pudieran observarse.

Esta Mancomunidad debe plantearse seriamente la necesidad de cambiar la imagen que ofrecemos al visitante y al propio vecino. Unos contenedores a rebosar de basura, sucios y malolientes no es el mejor escaparate que podemos encontrarnos para una correcta “dinamización turística del Norte”. En este sentido, debemos apostar por el soterramiento de contenedores si queremos cambiar esta imagen tan negativa.

Esperamos por el bien de los ciudadanos y por la higiene pública, esta vez sí, resuelvan de una vez por todas, un problema que llevamos años arrastrando. Menos salir en la foto y más y mejor gestión para los intereses públicos.